Marcelina Huentecura Aillapan es mapuche y artesana de la comuna de Carahue, del sector Taife. Su emprendimiento se llama Ülcha Küyen que significa cuando la luna está nueva. Se dedica a la fabricación de joyas en plata con identidad mapuche: aros, colgantes, cadenas, pulseras, trabajos a pedido, prendas tradicionales ceremoniales y réplicas con diseños antiguos.
“Antes hacía flores, cosas más chilenas, más estándar. Ahora trabajo con simbología mapuche únicamente, voy viendo los diseños que se hacían antes y los voy actualizando a esta época, es que son miniaturas”, expresó Marcelina.
La artesana trabaja con símbolos del telar mapuche como las grecas: “todos los pueblos originarios lo tienen en su cultura y para cada uno significa algo diferente: el greco, para los pueblos del norte es la chacana”.
Este símbolo distingue al lonko, comenta Marcelina y está en la manta negra y roja que aún son usadas. Antiguamente la roja la vestían para la guerra y la negra de uso normal, ambas llevaban grecos.
También está el colgante de cascahuilla como el instrumento de percusión de la música mapuche: “el sonido de la cascahuilla es tranquilizante por eso decidí hacerlo miniatura, en las ceremonias se usa para espantar las malas energías o espíritus, esa función cumple el sonido”. Es que el mapuche percibe la música también como un lenguaje que nos comunica con los espíritus, comenta la artesana.
Las figuras de estrella de 8 puntos simbolizan a Lefxaro (Lautaro): “es la fuerza del guerrero, la última estrella en el amanecer”, expresó.
Orfebrería en plata
Marcelina usa plantillas, dibujos que se ponen en la lámina, que luego cala con una sierra a pulso y les va dando la forma. También hay un proceso de limar para que quede liso o redondo según la forma “para hacer bien las terminaciones”.
Los diseños con relieve parten como una plancha y luego, la artista va soldando el dibujo y para esto usa el calor: “trabajo con un soplete de alta precisión con soldadura de plata. Esta es una técnica moderna, antiguamente se hacía con un molde y la plata derretida adaptada a él”, declara.
Todos los diseños que tienen forma humana se llaman pillán, que son espíritus protectores. Hay diferentes pillanes, pillanes femeninos, pillán masculino, pillán anciano. También hay pillanes aves; pillanes de alto vuelo. Los pillanes son personas importantes que mueren, pero su espíritu en vez de irse se queda a cuidar: “son personas que han sido destacadas, que han tenido algún don y lo desarrollaron”, manifestó.
Las formas de los aros con calado de luna representan a una mujer soltera y las que tienen dos caladas caracterizan a las mujeres casadas en los eventos sociales mapuche. “Así como hoy usan las ilusiones, los mapuches usaban los aros con sus calados. La luna tiene relación directa con la mujer y su fertilidad, así también con la tierra, con las plantas (hace que crezcan), incluso hace que las mareas suban o bajen”.
La plata adorna el cuerpo de los mapuche, les da estatus, protección y los vincula con sus antepasados. El rexafe es quien transforma la materia, es un intérprete y un creador. A Marcelina Huentecura se le puede contactar por su trabajo al + 56 995 977 655 o al correo ulchakuyen@gmail.com