Por Emilio Orive Plana
El destacamento militar avanza en forma lenta pero constante hacia el objetivo, previamente asignado en la macro zona sur del país, donde los sublevados están escondidos al borde mismo de un bosque cercano al viaducto, con armamento pesado de gran calibre y alcance, esperando que lleguen los tanques para tenderles una emboscada.
La intención de los rebeldes es clara: Destruir el mayor puente que une el territorio y así dividir el país, porque piensan que es legítimo recuperar su Lof ancestral del Bio Bio al sur y así poder crear un estado autónomo con sus propias leyes y autoridades que los representen pues tienen un idioma distinto, una identidad que proteger y hasta otra bandera.
Ayer, los ancianos y pichi wentru dejaron el mapu y se adentraron en lo más profundo del monte, huyendo del huinca uniformado, no así las mujeres y los peñis jóvenes que se quedaron a cuidar las rucas, los chanchos, gallinas y bueyes. En tanto los weichafe atrincherados, solo piensan en la auto defensa que desde tiempos antiguos creyeron que era legítima puesto que se saben originarios del Wallmapu heredado por sus ancestros.
No va a ser fácil porque ya han tenido también muertos a quienes llorar, pero que prontamente fueron vengados, quemando varias casas de los huincas , enemigos de su causa, incluso con sus moradores dentro, matando, además sus caballos y perros en represalia por el asesinato de varios peñi ejecutados por la espalda, dijeron.
La semana pasada fueron atacados por helicópteros de combate del ejército a los que respondieron con lanza cohetes, logrando derribar a uno de ellos y a la huida del resto que se habían camuflado con otras naves que extinguían un incendio forestal, aprovechando los combatientes el humo espeso para replegarse a lugares más seguros dentro de la montaña.
Reunidos en un bunker, los principales líderes de la cordillera costina discuten nuevas estrategias a seguir a raíz de las grietas que se han ido formando por el descuelgue del movimiento original, de nuevos grupos más radicales en su actuar que incluso han quemado iglesias, escuelas y asesinado a policías lo que no era parte del plan principal de recuperación territorial propuesto por su máximo líder, que desconfió siempre de la presencia, entre su filas, de «chilenos» que si bien los proveen de armas que les han servido para sus fines reinvicatorios, no les importan las demandas mapuche porque solo los mueve la ambición y sus propios intereses.
Para agravar el problema, dicho líder se encuentra preso y condenado en una cárcel huinca lo que ha levantado sospechas de traición a la causa por parte de los nuevos caudillos
La deslealtad y la discordia se han instalado en el corazón mismo del Wallmapu que loncos ni werquenes encargados de transmitir los acontecimientos de la guerra, pudieron prever.
Muchos opinan sobre la necesidad de entregar las armas ya que es imposible ganar la guerra por la superioridad numérica del enemigo, por eso es tan importante lo que quizás sea su último acto de rebeldía: El intentar destruir el gigantesco viaducto, símbolo opresor de su legado primitivo de libertad.
NOTA: Cualquier similitud con hechos ficticios, reales, actuales o no, es solo coincidencia y de la exclusiva responsabilidad e imaginación del autor de ésta columna de
opinión.
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