Cuando se ha cumplido dos meses y algunos días del asesinato de Damaris Ana Meleñir Llanqueo, unos de los crímenes más crueles en las ultimas décadas, ocurridos en la comuna de Nueva Imperial, los familiares piden cadena perpetua para el único imputado, Salas Muñoz por el salvaje crimen.
En los pensamientos de los habitantes imperialinos, aún está fresco este fatal desenlace, luego que a Damirs se le perdiera todo rastro, familiares y amigos que luego se sumaron instituciones, iniciaron una frenética búsqueda, por diferentes lugares sin resultados positivos.
Recordar que la joven mapuche se desempeñaba como cajera en un supermercado de la ciudad en calle República, salió ese día a su colación, para lo cual caminó un par de metros e instalarse a la espera de la locomoción en el paradero al costado sur del supermercado, que la llevaría a la casa de los padres de su pololo en Juvencio Valle, Villa Almagro, pero eso nunca ocurrió, porque una mente desalmada le troncha la vida a sus escasos 19 años, todos una vida por delante, además de sus sueños de superación.
Las investigaciones se centraron en un misterioso automóvil de color calipso, que captaron las cámaras de seguridad del supermercado, el cual ofreció a la joven trasladarla al domicilio de sus suegros, pero el individuo hoy detenido y confeso, nunca la trasladó al lugar, sino que condujo el móvil alrededor de unos 25 kilometras al sur de la ciudad.
A las 15 horas del referido primero de marzo abordada por Luis Salas Muñoz (65), un sujeto que alrededor de unos dos años había llegado a vivir a la comuna.
La querella presentada por el servicio Nacional de la Mujer y Equidad de Género (Sernameg) señala que, el individuo era habitual que trasladara a la víctima hasta su hogar por lo que se generó un vínculo de confianza.
Por eso, cuando la joven vio a Salas accede a que la traslade en su móvil, con la finalidad de dejarla en la vivienda de sus suegros, pero eso nunca ocurrió, sino que la traslada a su domicilio en el sector rural de Loma Larga camino Huidima, unos 25 kilómetros de la ciudad de Imperial y como en todos los domicilios campesinos son separados del uno con el otro, ningún vecino pudo escuchar ruidos extraños.
La fiscal de turno Paola Varela, instruye al personal de la SIP, de Carabineros, para que den inicio a las diligencias, que arrojó resultados importantes la tarde del miércoles 3 de marzo, la fiscal solicita ante el Tribunal de Garantía, una orden de entrada y registro en la casa del imputado, en el lugar encontraron el móvil con las característica del que se buscaba, los efectivos le consultan a Salas Muñoz, por la joven quien le respondió que no la había visto durante el día, le señalaron que durante ese día las cámaras habían captado su móvil, por lo que respondió que pasó a comprar al súper, que no vio a Damaris.
La dinámica según el escrito ingresado al tribunal da cuenta que como habrían ocurrido los hechos, dice que una vez en el inmueble el sujeto tomó del cuello a la víctima con sus dos manos, para terminar asfixiándola hasta causarle la muerte, para luego atarla de pies y manos arrojándola a un pozo, tapándolo con más de dos metros de tierra, tablas y otros elementos; en ese preciso momento llegó Carabineros .
Según la autopsia practicada en el Servicio Médico Legal, señalaron que la joven presentaba diversas lesiones en otras partes del cuerpo, además producto de la crueldad con que actuó el individuo.
Luis Salas Muñoz de 65 años, fue formalizado por el Ministerio Público como autor confeso de los delitos de homicidio calificado (alevosía) e inhumación ilegal, por lo que el antisocial se encuentra detenido en la cárcel de Valdivia. Los familiares, amigos y toda una comuna, piden una de cadena perpetua, para que nunca más salga de la cárcel a hacer daño a nadie.