El 12 de junio se ha establecido como el Día contra el Trabajo y la Explotación Infantil a nivel mundial. Sin embargo, los esfuerzos realizados en materia de políticas públicas en nuestro país, que buscan reducir los niveles de pobreza y desigualdad reflejan un duro escenario.
A pesar de que la legislación actual no permite contratar personas menores de 15 años, el estudio “Trabajo Infantil y Adolescente en Cifras”, que recurrió a 16.308 hogares de la V, VIII, IX y X regiones, encuestados entre febrero y abril de 2003 es claro. 42 mil niños y adolescentes dedican un tiempo superior a media jornada (21 horas y mas) a actividades domésticas. Siendo en el 85%de estas mujeres.
Otros 88.428 adolescentes, mayores de 15 años, trabajan con autorización de sus padres y sin dejar de asistir a la escuela; 107.676 menores trabajan entre 20 y 50 horas semanales; más de 8 mil niños, entre 5 y 14 años, trabajan de noche con jornadas superiores a las 14 horas y 13 mil niños y adolescentes trabajan en la calle.
Por otra parte, la encuesta Casen del año 2015 nos entrega datos reveladores. De los 4.369.035 niños, niñas y adolescentes entre los cero y 17 años registrados hasta esa fecha en Chile, el 17,3 % se encuentra en condiciones de pobreza extrema y no extrema.
En 2016, según cifras entregadas por la Seremi del trabajo y previsión social en conjunto con el Sename, existían 3.000 niños trabajando en La región. Las comunas con mayor índice por trabajo infantil mencionadas eran Collipulli, Carahue y Purén, relacionados al área agrícola. En tanto en Temuco y la zona lacustre lideran las tasas de peores formas de trabajo, ligadas fundamentalmente a la explotación sexual.
Chile se suscribió a la Convención sobre los Derechos del Niño en 1990, reconociendo el “derecho del niño a estar protegido contra la explotación económica y contra el desempeño de cualquier trabajo que pueda ser peligroso o entorpecer su educación, o que sea nocivo para su salud o para su desarrollo físico, mental, espiritual o social”. Sin duda flagelos que aún no se acaban.
