Esta semana, se conmemora a nivel internacional la semana de la lactancia materna que compartimos junto a todos los mamíferos del planeta.
Dentro la las características principales de los mamíferos está amamantar, éste privilegio permite que la cría tenga asegurada la alimentación durante el inicio de su vida hasta ser capaz de consumir otro tipo de alimentación por si mismo. Muchos de los mamíferos continúan mamando por muchos años siendo el orangután quien rompe el record llegando hasta los 9 años sin que se pierda el valor nutricional.
Pero como como ya hemos planteado en otras oportunidades los múltiples beneficios de la lactancia materna, hoy abordaremos esta temática desde el impacto medioambiental especialmente considerando que el lema de este año es “Apoyar la lactancia materna contribuye a un planeta más saludable”.
La preocupación por el medio ambiente nos lleva a cuestionar hábitos, costumbre y decisiones que hasta hace un par de años no estaban dentro del interés colectivo, es por esto que cada vez con más fuerza se han movilizado personas que buscan aportar su grano de arena en una temática que nos afecta a todos y especialmente a la futuras generaciones, ya que son ellas quienes tendrán que vivir en un planeta que entre muchas otras cosas, esta permeado por la falta de agua.
Como cada vez la sociedad se hace más consciente de ello, durante esta última década se ha disminuido el consumo de tabaco que no conforme con ser perjudicial para la salud de quien lo consume, produce gran impacto al medio ambiental debido a la contaminación del agua. Así como también ha aumentado el vegetarianismo y veganismo que dentro de todos sus fundamentos también busca la protección del agua y los recursos naturales, y así de esta forma disminuir su huella de carbono en el planeta.
Como desde diferentes ámbitos encontramos personas que están intentando proteger el cuidado del planeta, una buena manera de cuidar el mundo en el cual vivirán nuestros hijos e hijas es cuestionemos los elementos que compramos pensando en ellos y ellas.
¿Cuánto plástico tiene este juguete? ¿Cuántos kilómetros tuvo que viajar para que yo lo compre? ¿De qué manera este elemento será educativo o potenciara el desarrollo de mi hijo/hija? ¿Realmente lo necesita? Son algunas de las preguntas que te puedes realizar antes de comprar utensilios tales como ropa, juguetes, alimentos, etc.
En este mismo sentido debemos ser conscientes que para producir 1 kilo de formula láctea se necesitaron 4000 litros de agua, por lo cual si apostamos por la lactancia materna exclusiva por lo menos hasta los 6 meses se ahorra el equivalente de 95-153 kg de CO2 por bebé. Sin contar las toneladas de papel, bolsas y/o aluminio generado para la contención y preservación de esta fórmula. Entonces vale cuestionar ¿Qué tan necesario es?
A pesar de que sabemos los múltiples beneficios tanto para el sano desarrollo de los bebes como para la economía familiar y para el planeta, aun la cultura de la lactancia materna se encuentra en vías de desarrollo, pero ya con el hecho de ser consientes de esto nos da la oportunidad de fomentar y alargar la lactancia materna hasta el máximo, recuerda que nunca dejara de ser un buen alimento para tu bebe.
Desde el Hospital Familiar y Comunitario de Carahue les enviamos un reconocimiento y felicidades a todas quienes lo han logrado y/o elegido amamantar, siguen amantando y continuaran amamantando. ¡Feliz semana de la lactancia materna!
Información entregada por la profesional del Hospital Familiar y Comunitario de Carahue, Mariana Pino Valdebenito, Educadora de Párvulos SET, quien nos informa sobre las ventajas de la lactancia materna.
