Nuevamente, en Traiguén lamentamos un incendio de gran magnitud. Estamos en la entrada del pueblo, donde había una barraca que ya no está, y hacia abajo hay una población con muchas familias en riesgo. El viento en este momento es fortísimo, alcanzando cerca de 80 km/h, lo que complica aún más la situación.

En nuestro recorrido hemos constatado que, lamentablemente, este incendio pudo haber comenzado por roces o quemas que estaban autorizadas hasta ayer y que probablemente se reactivaron. No lo sabemos con certeza, pero es una posibilidad.
Estamos aquí en terreno para coordinarnos con CONAF y el delegado presidencial y ver cómo podemos colaborar y ayudar en esta tragedia. Como vecina de esta comuna, no podía estar en otro lugar que no fuera acá, junto a la gente que hoy nos necesita.
Por eso, hago un llamado a todos quienes nos escuchan: recemos por Traiguén y, sobre todo, preparemos ayuda para cuando esta emergencia termine.»