En una enriquecedora charla denominada «Las rutas de los pueblos ancestrales», a cargo del doctor Jorge Pinto Rodríguez, Premio Nacional de Historia y director del Instituto Ta Iñ Pewam de la Universidad Católica de Temuco (UCT), se destacó la trascendencia de estas rutas ancestrales en la historia de América y cómo un estudio, patrocinado y financiado por CMPC, permitió reconstruir las bases del patrimonio vial de la región. La investigación fue desarrollada con participación de un equipo multidisciplinario de expertos de Chile y Argentina, integrando ciencia, historia y cultura.
Así, en el auditorio del Edificio Corporativo de CMPC en Los Ángeles, se llevó a cabo esta charla sobre lo que ha arrojado el proyecto, que contó con la participación de autoridades académicas, investigadores y representantes de CMPC, autoridades educativas de Los Ángeles y La Araucanía y del Instituto Ta Iñ Pewam UCT.
El doctor Pinto destacó la satisfacción de haber reunido a un grupo de aproximadamente 20 investigadores de distintos países, incluidos Estados Unidos y Argentina, así como de diversas regiones de Chile: «Siento mucha satisfacción porque logramos un grupo de aproximadamente 20 investigadores de distintos países, un grupo importante de investigadores de primer nivel, la mayoría arqueólogos, antropólogos, algunos historiadores documentalistas, una diversidad de profesionales que colaboraron en esta investigación que se traducirá en un libro», señaló.
Además de la diversidad del equipo, el proceso fue un viaje de aprendizaje continuo. Pinto agradeció especialmente a Isolde Reuque (secretaria ejecutiva del Instituto Ta Iñ Pewam) por su ayuda en comprender elementos que, desde su formación tradicional occidental, desconocía. Este intercambio de conocimientos y perspectivas fue fundamental para el desarrollo del proyecto.
«Estas rutas son la tercera red vial más extensa en la historia de la humanidad, alcanzando unos 25.000 kilómetros que unen desde el sur de Colombia hasta el río Mataquito en Chile. Este camino, conocido como el Qhapaq Ñan o Camino del Inca, es un legado fundamental que conecta y atraviesa siglos de cultura y conocimiento indígena», apuntó el doctor Pinto.
El proyecto culminará con la publicación de un libro que ya está en proceso de impresión, el cual recogerá todo el trabajo y los descubrimientos realizados. Además, se planea la publicación de un segundo libro, destinado a los niños de los colegios, con relatos cortos e ilustraciones que enseñarán a valorar el aporte de los pueblos ancestrales al desarrollo de Argentina y Chile. Esta iniciativa busca romper la relación asimétrica existente y fomentar una mayor apreciación y comprensión de las culturas originarias entre los más jóvenes.
Ignacio Lira, gerente de Asuntos Corporativos Bosques de CMPC, valoró el impacto cultural del proyecto y reafirmó el compromiso de la empresa con la preservación del patrimonio: «Estamos orgullosos de haber sido parte de esta iniciativa. Proyectos como este no solo rescatan la memoria histórica de los pueblos originarios, sino que también fortalecen el diálogo intercultural y nos invitan a reflexionar sobre nuestra relación con el territorio. Este conocimiento tiene el potencial de enriquecer profundamente a las comunidades locales y a la educación en todos los niveles».
El proyecto «Las rutas de los pueblos ancestrales» no solo representa un aporte académico, sino también un esfuerzo significativo para preservar y difundir el patrimonio cultural de los pueblos originarios. La colaboración internacional y el apoyo institucional han sido claves para el éxito de esta iniciativa, que promete generar un impacto duradero en la educación y la cultura de ambas naciones.