Desde el sábado 8 de septiembre, la Diócesis de Villarrica tendrá a tres nuevos sacerdotes que se sumarán al clero que hoy ejerce funciones pastorales en 30 parroquias distribuidas en las regiones de La Araucanía y Los Ríos.
Ese día, los diáconos en tránsito, Cristian Rivera, Daniel Rojas y Erwin Sanhueza recibirán el orden presbiteral en una Eucaristía que oficiará monseñor Francisco Javier Stegmeier en la Catedral de Villarrica a las 11 horas.
Los futuros sacerdotes fueron consagrados como diáconos transitorios a principios de este año tras un largo proceso de formación intelectual, humana y espiritual.
La ceremonia tendrá lugar en medio de la crisis que atraviesa la iglesia católica chilena y la escasez de vocaciones. De hecho, la última consagración sacerdotal en Villarrica ocurrió en diciembre de 2011.
Por eso, desde el Obispado anunciaron con alegría la noticia e invitaron a “acompañar a los hermanos y unirse al gozo de la iglesia diocesana” y pidieron “rezar por ellos para que sean pastores según el corazón de Cristo”.
Costa
Uno de los tres jóvenes que será investido como pastor es Cristian Rivera Suazo, quien pertenece a la Parroquia San Antonio de Toltén. Rivera recibió el diaconado en marzo en una masiva misa que congregó a fieles católicos de la Costa en el templo de esa ciudad.
Son esos mismos creyentes que hoy esperan con ansias el 8 de septiembre para ver, a uno de los suyos, asumir una nueva responsabilidad en la Iglesia.
En la Costa, 5 parroquias dependen de la Diócesis de Villarrica: San Antonio de Toltén, Cristo Rey de Teodoro Schmidt, Nuestra Señora del Pilar de Puerto Domínguez, Sagrado Corazón de Jesús de Puerto Saavedra e Inmaculada Concepción de Boroa. Todas ellas integran el Decanato San Pedo de la Costa.