Los beneficios y alternativas que ofrece la fruta natural o silvestre, que en la época estival brinda una buena alternativa, a los que gustan de las mermeladas caseras, en este caso nos referimos a la zarzamora, que en estos tiempos los campos sureños están plagados de este fruto.
La zarzamora es una planta generalmente silvestre de la que se aprovechan sus frutos, unas bayas pequeñas de color negro cuando se encuentran maduras muy aromáticas y algo ácidas. Se consumen crudas, aunque también se emplean en la elaboración de compotas, macedonias, tartas, etc. Son ricas en vitaminas y minerales. Además, aportan fibra y contienen pocas calorías.
A la zarzamora, aporta en alimentación y nutrición, pero también se le atribuyen muchas otras propiedades curativas. Se pueden usar sus frutos, sus hojas y los brotes tiernos. Combate diversas afecciones como la diabetes, las anginas o las úlceras.
Es una planta vivaz, leñosa y muy invasiva, con largos tallos flexibles llenos de espinas. Las hojas son pinnadas y se dividen en foliolos ovales, dentados, pubescentes por la parte inferior; están cubiertas de finas espinas, especialmente por la nervadura media. Las flores son de color blanco o rosado y se agrupan en racimos terminales. El fruto, denominado mora, es compuesto y globuloso. Los diversos colores que adopta determinan el grado de maduración (verde, rojo y negro, respectivamente). La planta presenta al mismo tiempo la floración y los diversos grados de maduración del fruto, hecho inusual en otras plantas.
Por su alto contenido se compone de virtudes medicinales de taninos, su principal efecto es el astringente, por lo que se recomienda en el tratamiento de la diarrea. En forma de gargarismo es útil en las úlceras aftosas de la mucosa bucal y como tratamiento complementario de la amigdalitis y la faringitis.
Es lo que nos ofrece este fruto que en los campos se mira como, maleza muy difícil de erradicar, por sus profundas raíces.
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